lunes, 30 de abril de 2012

LAMIENDO TUS HERIDAS



Quizás podría dejar de amarte, de necesitarte,
 de añorarte cada segundo que nos separa
podría ignorar tu sufrimiento, cerrar los ojos,
perderme en mis negras catacumbas .

Quizás podría dejar de pensar, de sentir, de recordar
y sumirme en el turbio remolino del vacio
huyendo de la pena, de la rabia, de la culpa
y dejarme arrastrar hacia la nada.

Quizás podría dejar de respirar
sentarme en mi butaca,
 cerrar mis ojos, mis poros, mis pulmones
y fumarme a mí mismo en la última pipa
nadar desnudo hacia la tierra prometida
allende el horizonte.

Pero el amor no suelta sus cadenas
y me ata a tu piel, a tu cuerpo, a tu destino
y no puedo emprender el viaje
si tu no vas conmigo
y no encuentro más luz que tu mirada
ni más aliento que el soplo de tus labios
y me acurruco a tus pies lamiendo tus heridas
aullando tus penas apagadas
suplicando una caricia, una sonrisa un beso
que me devuelva la paz y la esperanza.

JUANMAROMO

1 comentario:

Unknown dijo...

Preciosa poesía..