miércoles, 10 de marzo de 2010

ENDESA VUELVE A DEJAR A CATALUÑA A OSCURAS

Más de 30 torres de alta tensión se quebraron por un diseño inadecuado

  1. •  Los soportes no estaban preparados para aguantar el peso del hielo acumulado
  2. • Red Eléctrica y Fecsa se justifican en que la nevada fue «muy excepcional»

Una torre de alta tensión quebrada en Salt, ayer. Foto: CLICK ART 
FOTO / EDDY KELELE
Una torre de alta tensión quebrada en Salt, ayer.
MARÍA JESÚS IBÁÑEZ
BARCELONA
Sucede pocas veces, pero cuando ocurre, las consecuencias son devastadoras. La combinación de nieve húmeda y viento intenso registrada el lunes en Catalunya provocó la aparición de una multitud de formaciones de hielo, conocidas por los ingenieros como manguitos de hielo, que al acumularse sobre los cables eléctricos originaron un sobrepeso fatal, de una magnitud difícil de calcular. Hasta 33 torres de Fecsa Endesa acabaron resquebrajándose y cayendo al suelo quebradas por la mitad. Eso hizo que 14 líneas quedaran fuera de servicio y fallaran entre siete u ocho subestaciones.
El hielo causó también problemas en la principal y única línea de transporte de electricidad del área de Girona, una infraestructura de 220 kilovoltios, que va desde Vic (Osona) hasta Juià (Gironès) y que Red Eléctrica de España (REE) no logró reparar hasta pasadas las seis de la tarde de ayer, unas 24 horas después de que el temporal la dejara fuera de servicio. La acumulación de hielo, argumentó la compañía, dañó en tres puntos distintos un cable de tierra, un hilo que no conduce energía y que actúa como pararrayos de la línea de alta tensión.
«Ha sido una situación tremendamente excepcional, una nevada nada habitual en esa zona, que produjo depósitos de hielo también muy excepcionales», afirmó Lluís Pinós, delegado de REE en Catalunya. El problema para los 220.000 abonados de Girona y el norte del Maresme que ayer pasaron prácticamente todo el día sin luz –la cifra fue reduciéndose gradualmente a lo largo de la jornada hasta los 66.000– es que no hubo manera de reconectarles a una línea alternativa. «La precariedad del sistema eléctrico de Girona, que no dispone de una red mallada, hace que ante situaciones extremas no sea posible dar respuesta a sus necesidades eléctricas», informó REE. La proyectada línea de muy alta tensión (MAT)
debería aliviar este problema.

PROBLEMA DE DISEÑO / Todas las fuentes consultadas por este diario
coincidieron ayer en el diagnóstico: las 33 torres que sucumbieron bajo el peso del hielo no estaban preparadas para semejante situación. «Es una cuestión de diseño», explicó un portavoz de Fecsa Endesa. «Los soportes que se instalan en una zona cercana al mar no están diseñados igual que los que se colocan en alta montaña o en una llanura. En cada caso se adaptan a la orografía y a las condiciones climáticas», agregó.
«Uno de los factores que se aplican en la construcción de una línea eléctrica es el coeficiente de intemperie, que tiene en cuenta si donde se coloca una torre es una zona lluviosa o si hay más o menos nevadas», indicó el ingeniero Joan Vilà. «Es evidente que Osona no es tierra de nevadas», observó. Las torres de acero galvanizado abatidas no habían sido diseñadas para soportar los manguitos de hielo, concluyó Vilà.
Fecsa Endesa empezó a instalar ayer un centenar de grupos electrógenos en las poblaciones afectadas por el apagón. «Se han cubierto las principales necesidades, pero aún estamos trasladando generadores desde fuera de Catalunya, porque todo apunta a que la reparación va para largo», explicó Rosa Morillo, portavoz de la empresa Grup Morillo, una de las que colaboró en la instalación de equipos de emergencia.

1 comentario:

Unknown dijo...

Debido a la hecatombe que han o están sufriendo muchos pueblos de Girona por causa de la mala infraestructura y mantenimiento de las líneas eléctricas, hay personas sugieren de "no pagar" el recibo de la luz y otros "cambiar de compañía". Creo que la mayor fuerza que podemos hacer para conseguir unas garantías por parte de Fecsa-Endesa sería, que todos redujéramos al máximo el consumo de luz, ya que dentro OBTIENEN sus grandes beneficios que les permite invertir en otros países, pero no en el nuestro y así nos va. Estoy totalmente de acuerdo en soterrar las líneas eléctricas, muchas de las torres que ahora han caído en Girona tenían 24 años de vida ya que se instalaron en la gran nevada de febrero de 1986.